
Soy Técnico Superior en dietética y también graduada en nutrición humana y dietética o Dietista nutricionista (DN).
Soy miembro de Dietética sin Patrocinadores y estoy acreditada como antropometrista ISAK 1. También soy Técnico superior en diagnostico clínico. Me apasiona la docencia, dar charlas y hacer talleres.
Nutricionista por casualidad, pero apasionada de lo que hago. Sanitaria por vocación e inquieta, muy inquieta y con ganas de saber más y más…
Trabajé casi 10 años en una consulta de medicina deportiva. Durante ese tiempo estudié psicología, aunque no pude terminarlo por cuestiones laborales, y es algo que me resulta muy útil en consulta.
Además de la consulta daba clases de ciclo indoor, aerobics… ¡no paraba quieta! La maternidad cambió mi rumbo, ya que lo que la vida que llevaba ocupaba todo mi tiempo y así, decidí que era hora de ponerme por mi cuenta, aunque hecho de menos este trabajo interdisciplinar de la consulta y lo practico siempre que puedo. Creo que la salud debe tratarse de forma que integre diferentes ciencias: medicina, psicología, nutrición…
Estaba convencida de que la nutrición deportiva era lo que mas me gustaba. Me equivocaba. Después de varios másteres en deportiva hice uno en nutrición infantil que, para mi sorpresa, me gusto muchísimo y creí que ese era mi camino hasta que comencé a indagar y a formarme en nutrición clínica y descubrí mi verdadera pasión.
Soy de una familia de padres trabajadores. Mi generación es una de las mas “PERJU-BENEFICIADAS” de toda esta revolución de la industria de la alimentación.
Beneficiadas porque los procesados entraron en nuestras vidas para “facilitar” el día a día de gente como mis padres que trabajaban tanto tiempo fuera de casa. Los precocinados solucionaban el día a día de muchas familias mientras al mismo tiempo, perjudicaban nuestra salud y sobre todo, modificaban nuestros hábitos de vida.
Es por eso por lo que aprendí a cocinar por mi cuenta, y poco a poco me fui adentrando en el mundo de la cocina, antes que en el de la nutrición. Me gusta mucho cocinar, pero sin florituras. Soy madre, soy autónoma… TENGO QUE PRIORIZAR Y ORGANIZARME BIEN PARA PODER ABARCAR TODO.
Me gusta comer, me gusta cocinar, pero no tengo tiempo ni paciencia. Cocino cosas fáciles, ricas y sobre todo… ¡que manchen poco! intento enseñaros a cocinar cosas sencillitas que además de ricas sean sanas. ¡La organización es fundamental! Para comer bien hay que organizarse bien. Cocinar mejor o peor (o nada de nada) es menos importante de lo que parece.
Me gusta decir que cuento con alguna ventaja extra: MIS HIJOS. Las perrerías que me han hecho pasar con la comida no se las deseo a nadie, pero me han dado otra visión de la alimentación infantil… porque NO.
No todo los que nos han enseñado en los cursos de alimentación infantil funciona: ¡PARA NADA! Al igual que los adultos, cada niño es un mundo y lo que puede funcionar con unos, ¡no funciona con otros!Otra ventaja: SOY HUMANA. De esas que tropiezan (y seguirán tropezando) con la misma piedra por lo que… tengo recursos para ayudarte a esquivarla o si caes, puedo ayudar a levantarte y acompañarte en el camino.
Tropezándonos es como mas aprendemos a llegar a meta (meta =salud) en esta maratón (maratón= hábitos de vida saludables).